Este hotel tradicional está situado en una zona tranquila, a orillas del lago de Tollensesee, rodeado por el hermoso paisaje del distrito de los lagos de Mecklemburgo.
Este es el destino perfecto para disfrutar de unas vacaciones en la naturaleza, ya sean activas o de relax. Cerca del hotel hay un lugar para la natación y un embarcadero para barcos de vapor.
Este establecimiento es adecuado tanto para personas que viajan solas, como para grupos y familias. Alberga un restaurante que sirve cocina regional de calidad y ofrece muchas instalaciones deportivas y de ocio. Cerca del hotel hay varias localidades dignas de visita, como Nuevo Brandeburgo.